oficinas
Barcelona, 2010
El nuevo estudio Sandra Tarruella es un reflejo del espíritu de trabajo en equipo y comunicación entre todas las partes. El local, un entresuelo que había sido una vivienda, se vacío por completo para poder disponer de la máxima amplitud para una gran mesa central de trabajo, donde todos colaboradores participan de la evolución de los proyectos. Solo se dejaron dos habitaciones en los extremos para salas de reuniones, una pensada más para clientes con una librería para revistas y libros, y otra para reuniones internas, con una pequeña cocina y salida al patio. Esta pequeña cocina es el motor de reuniones improvisadas e intercambio de opiniones espontaneas.
El nuevo espacio quería huir de una estética minimalista, seria y estática para reforzar la idea de espacio relajado de trabajo. Para ello todo el pavimento de madera aporta la calidez necesaria y sirve de base para mesas blancas de trabajo, distintas sillas recuperadas o de muestrario y una mesa antigua para maquetación y muestras. También se descubrió el techo con la bovedilla existente y se pintó de un color claro con pintura a la cal, al igual que las paredes que dan a la calle. La pared opuesta se pintó de un color mocca, base para la estantería metálica Mecalux que alberga todos los catálogos y muestras, y también la pared de revistas de la sala de reuniones principal. Sólo la sala de la cocina se pintó de gris oscuro, junto con el patio, para crear esta atmósfera mas recogida para la tertulia.
Al derribar los falsos techos, aparecieron varios conductos de agua existentes con un trazado sinuoso, estos sirvieron de base para un juego de conductos eléctricos que discurrían por todo el local a modo de vías que se entrecruzan. Este nuevo elemento servía para crear un juego desenfadado de lámparas a distintas alturas que iluminan la gran mesa de trabajo, así como el resto de elementos. El conducto de aire acondicionado junto a esta instalación y la estantería metálica confieren al espacio un aire industrial.
Dirección creativa: Tarruella Trenchs
Responsable: Laura Muñoz
Superficie: 120 m2
Fotografo: Montse Garriga
< Atras
PUBLICACIONES
HABITANIA 114
Pg. 116-117
2010
PRENSA DIGITAL
www.http://therestauralist.blogspot.com
2010-11-11
Sandra Tarruella, reinventando espacios
Estudio Tarruella Trenchs
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2010
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Sandra Tarruella, reinventando espacios
Estudio Tarruella Trenchs
Oficinas
Barcelona, 2010
El nuevo estudio Sandra Tarruella es un reflejo del espíritu de trabajo en equipo y comunicación entre todas las partes. El local, un entresuelo que había sido una vivienda, se vacío por completo para poder disponer de la máxima amplitud para una gran mesa central de trabajo, donde todos colaboradores participan de la evolución de los proyectos. Solo se dejaron dos habitaciones en los extremos para salas de reuniones, una pensada más para clientes con una librería para revistas y libros, y otra para reuniones internas, con una pequeña cocina y salida al patio. Esta pequeña cocina es el motor de reuniones improvisadas e intercambio de opiniones espontaneas.
El nuevo espacio quería huir de una estética minimalista, seria y estática para reforzar la idea de espacio relajado de trabajo. Para ello todo el pavimento de madera aporta la calidez necesaria y sirve de base para mesas blancas de trabajo, distintas sillas recuperadas o de muestrario y una mesa antigua para maquetación y muestras. También se descubrió el techo con la bovedilla existente y se pintó de un color claro con pintura a la cal, al igual que las paredes que dan a la calle. La pared opuesta se pintó de un color mocca, base para la estantería metálica Mecalux que alberga todos los catálogos y muestras, y también la pared de revistas de la sala de reuniones principal. Sólo la sala de la cocina se pintó de gris oscuro, junto con el patio, para crear esta atmósfera mas recogida para la tertulia.
Al derribar los falsos techos, aparecieron varios conductos de agua existentes con un trazado sinuoso, estos sirvieron de base para un juego de conductos eléctricos que discurrían por todo el local a modo de vías que se entrecruzan. Este nuevo elemento servía para crear un juego desenfadado de lámparas a distintas alturas que iluminan la gran mesa de trabajo, así como el resto de elementos. El conducto de aire acondicionado junto a esta instalación y la estantería metálica confieren al espacio un aire industrial.
Dirección creativa: Tarruella Trenchs
Responsable: Laura Muñoz
Superficie: 120 m2
Fotografo: Montse Garriga
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